Desde 2009 se creó, en la Comuna 9, Buenos Aires, el Colectivo de Mujeres, con el objetivo claro de empoderar social y políticamente a las habitantes de este sector de la ciudad.
Ya han pasado 10 años de ardua labor, en los que el colectivo se ha fortalecido como un espacio de encuentro comunitario, de diálogo permanente y de formación ciudadana.
“Somos una organización social comunitaria, reconocida por las lideresas y líderes de la Comuna 9, que nos apoyan y respaldan junto con las entidades públicas como Secretaría de las Mujeres y la Alcaldía de Medellín, para que nuestras ideas se posicionen y tengan eco en otras personas (…) Buscamos el ejercicio pleno de nuestros derechos, así como la relación de equidad entre hombres y mujeres para disminuir las prácticas excluyentes, construir espacios de vida digna y reducir los índices de violencia de género”, expresa Alba Luz Gaviria Bermúdez, integrante del Colectivo de Mujeres desde hace 10 años.
Provenientes de extremos diversos del espectro social de la comuna, a través de un proceso de diálogo, estas mujeres ahora se centran en un objetivo común. El colectivo brinda un ejemplo sobre cómo la diversidad puede ser adoptada y utilizada para lograr un cambio positivo en un sector de la ciudad donde es necesario visibilizarnos como una comunidad.
10 años de reflexión y crecimiento social
El Colectivo se convierte en un espacio de reflexión sobre el papel que ejercen las mujeres y los hombres en la sociedad. En algunas ocasiones, de acuerdo con la disponibilidad, se llevan las actividades a diferentes barrios de la comuna para incentivar la participación y descentralizarla.
Ocasionalmente se organizan encuentros enfocados en la salud mental de las mujeres y charlas talleres sobre violencia de género.
Constantemente las asistentes al colectivo reciben formación de organizaciones reconocidas en el tema de género, con el fin de que se conviertan en replicantes de los conocimientos adquiridos y animen a otras mujeres a participar de él (…) Por ejemplo hoy estamos en una actividad para crear un mapa de calor de la comuna, identificando lugares en donde la percepción de seguridad de la mujer se ve vulnerada y, a su vez, identificamos puntos de referencia de importancia para nosotras”, María Camila Uribe Valencia, acompañante del Colectivo por parte de la Secretaría de las Mujeres de Medellín.
Un encuentro para el fortalecimiento en territorio
Con un promedio de 40 miembros todos los viernes a las 2:00 de la tarde, se reúnen en el Salón Sede Social del barrio El Salvador, para evaluar las actividades anteriores, crear nuevas estrategias, compartir y aplicar el conocimiento y reflexionar acerca del rol de este espacio en la comuna.
“Yo soy de las miembros más nuevas y me siento muy contenta con todo lo que hacemos en el colectivo por el bienestar de las mujeres en Buenos Aires (…) A mí me parece muy útil todas las capacitaciones que recibimos en temas de liderazgo, vocería, empoderamiento y participación comunitaria, así como los encuentros de integración con otros colectivos y asociaciones de mujeres (…) El próximo mes celebraremos los 10 años con una salida a Santa Elena con el fin de conocer las visiones de las mujeres en otras partes cercanas la ciudad”, manifiesta Nathaly Ramírez Contreras, miembro del Colectivo de Mujeres de la Comuna 9.
El trabajo no se detiene y falta mucho por lograr
Desde 2003 Medellín cuenta con una política pública para las mujeres, creada por el Acuerdo 022 de ese mismo año. A pesar de que existan estas iniciativas, el panorama en la ciudad, en materia de equidad, es preocupante. De acuerdo con cifras de la Secretaría de las Mujeres, el 53% de la población femenina de Medellín experimenta desigualdades en materia del acceso a sus derechos y garantías.
Para formar parte del Colectivo basta tener la intención y el deseo de aportar, con pequeñas acciones, para construcción de un entorno en el que los hombres y las mujeres tengan las mismas condiciones y oportunidades para desarrollarse y llevar a cabo sus proyectos personales y sociales.
Periodista: Jorge Arboleda